Comprender la causa raíz de los síntomas de reflujo
Las pruebas de pH esofágico pueden evitar el uso de inhibidores de la bomba de protones (IBP) en el 50% de los pacientes con síntomas de reflujo gastroesofágico.
Mediante la monitorización combinada de pH esofágico e impedancia, se ha demostrado que los síntomas refractarios suelen estar asociados a eventos de reflujo débilmente ácidos.
La monitorización mediante catéter permite añadir la impedancia y detectar el reflujo débilmente ácido o no ácido.
El sistema Digitrapper™ pH-Z está pensado para registrar, almacenar, visualizar y analizar datos de pH esofágico y gástrico (y opcionalmente, niveles de impedancia) para diagnosticar trastornos de reflujo